ANTOLOGÍA: BYRON NARVAEZ

BYRON NARVAEZ. Pasto, Nariño, 1 de julio de 1989. Artesano tapicero que soñó con las letras y se convirtió en profesor de Humanidades y Lengua Castellana de la Universidad Minuto de Dios. Un pastuso que, a pesar de su tradición católica, se alejó del dogma para representar al Hairetikós entre comparsas y carrozas cada seis de enero. Participante en el taller de poesía “Los impresentables” (2014) y Taller Distrital de Poesía IDARTES (2019). Candidato a Magister en Creación Literaria de la Universidad Central de Colombia. Ha participado en publicaciones de la Revista Literaria Scriptoris y la muestra antológica “Circulo de sombras”.

Castillos de cartón 

“A todo se llega, 
he aprendido a ser sucio
y me parece bien”

Juan Ramón Jiménez

Las calles 
anuncian por fuerza
el pacto de la hambruna 

los sollozos del cartón 
muestran títulos en blanco

el profeta
busca entre bolsas 
la sonrisa mutilada 

La felicidad es un lustre desdentado
un cielo de estrellas cariadas

Captura 

Cegado en segundos 
por la estrella artificia
una luciérnaga florece 
y muere para el retrato

Convexo

 «Un espejo no tiene corazón sino copia de ideas»

Luis Vidales

La memoria se muestra en un fragmento
mutila una realidad entre cristales
garantía en el juego del símbolo 

Secreto de la casa antigua
muestra el retrato de cada instinto.

Nace un reflejo
                              otro yo
Nuevos versos delatan la fachada

laguna de palabras donde el oleaje
                                     borra la memoria

Atlas

El don de los dones
descansa sobre el lomo cansado
la luz de Prometeo
aumenta la carga

En su fatiga 
soporta la historia
del peso avaro
que ciega al hombre

La razón,
es el yugo del Titán
que no destruye el mundo
al precipitarlo
 a la nada.

Madrugadas

Un pájaro anida en mi cabello
su pico es ligero, no le gusta que lo toque
en los días de resaca,
taladra mi cabeza;
le fastidia el olor a cigarrillo,
aunque gusta de la cerveza y el aguardiente,

al sentir la embriaguez en sus alas
alza el vuelo a su antojo
entre lagunas, solo existe el flashback de la noche
y cuando vuelve, regresa con las alas rotas

quién sabe cuántas aves cautivó
cuantos nidos dejó sin cobijo
y a cuantas madres,
con sus plumas derrotadas
abandonó a su defensa
con el peso del viento

pero vuelve,
           siempre vuelve a mi cabello
allí duerme su resaca
prepara su vuelo para migrar lejos del mundo